La Casa Isidro representa la perfecta fusión entre la esencia tradicional y la modernidad, donde la historia se entrelaza con la innovación. Nuestro desafío fue preservar la autenticidad de la casa mientras se actualizaban los materiales y se incorporan elementos contemporáneos para crear un espacio que inspire a ser vivido plenamente.
Una de las principales transformaciones que propusimos fue la creación de un espacio en planta alta destinado a la hija de los propietarios, Belén, y su esposo. Este nuevo nivel se complementa con una galería y una tira de fuegos, añadiendo un toque de calidez y convivialidad al ambiente.
La integración de espacios es una característica distintiva de la Casa Isidro. El living y el comedor se fusionan en la galería, generando nuevos espacios intermedios que invitan a la exploración y al disfrute de la vida al aire libre.
La luz y la vegetación se convierten en protagonistas en cada rincón de la casa, filtrándose a través de cada vano y creando una atmósfera luminosa y revitalizante. Los materiales como el hierro, la madera y el mimbre fueron cuidadosamente seleccionados para preservar la rusticidad de la casa, añadiendo textura y carácter a cada espacio.
En la Casa Isidro, la modernidad se encuentra en perfecta armonía con la tradición, creando un ambiente acogedor y estimulante que invita a ser vivido y disfrutado en cada momento.